Esta tarde participé del encuentro "Consecuencias del acuerdo con el FMI: Impacto sobre el trabajo, las Pymes y los sectores vulnerables", desarrollado por el diputado Nacional Daniel Arroyo en el Sindicato de Empleados de Comercio. Participaron compañeros y compañeras que se desempeñan no sólo en el área de comercio, sino también en múltiples rubros golpeados por las medidas económicas que están favoreciendo a grandes empresarios, dejando de lado a la producción nacional.

Daniel Arroyo propuso tres puntos principales para reactivar la economía de los barrios y generar un freno a la crisis social: decretar la emergencia alimentaria, proveer de un sistema de créditos blandos para las familias y producir “mano de obra intensiva” para la pequeña obra pública. “Primero hay que decretar la emergencia alimentaria. A la gente no le alcanza la plata, porque los costos son muy altos. Esto consistiría en bajar los precios de los principales productos de la canasta familiar”.

La gente se está endeudando para poder sobrellevar la vida cotidiana. Por eso planteó la necesidad de un “crédito no bancario” para 500 mil personas; algo que fue presentando como proyecto en el Congreso de la Nación.
“La idea sería inundar de herramientas el Conurbano. Para que la gente se pueda financiar sus herramientas de producción”, explicó.

El tercer punto de un plan para reactivar la economía en el país, es generar “mano de obra intensiva para la obra pública”. “Con esto le pondríamos un piso a la crisis, que está complicando las cosas en los barrios”.

La charla se dio precisamente a horas de conocer los últimos datos del INDEC referidos a la inflación del mes, 3,7%, la más alta de los últimos 25 meses, hecho que refleja la incapacidad del Gobierno para combatir ese constante aumento.





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