En este 31 de octubre, contribuimos a la jornada nacional por la neurodiversidad, evento que se desarrolla de manera simultánea en 200 ciudades de nuestro país. Hablar de salud mental y de neurodiversidad es hablar de incluir en el verdadero sentido de la palabra. Quienes padecen, necesitan ser escuchados: hoy hay diagnósticos tardíos, negación por parte de las obras sociales, dificultad para el acceso a las terapias y falta de capacitación de los equipos de salud para escuchar más a los maestros que pueden detectar llamados de atención. Necesitamos revertir esta situación y que la igualdad sea concreta.





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