Un día que sirve para denunciar la violencia que se ejerce sobre las personas, al ser discriminadas por su género en todo el mundo y para reclamar políticas en todos los países para su erradicación. En Argentina, al día de hoy, 290 mujeres murieron en manos de la violencia machista. La cifra asusta, paraliza, hace daño. Hacer que nos vean es la consigna, levantando la voz por las que ya no están, físicamente, pero cuyos nombres nos empujan a marchar, a movernos, a decir #BASTA. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) lleva años trabajando para poner fin a esta lacra que afecta mayoritariamente a mujeres y a niñas de todo el mundo.

Una sociedad no puede llamarse democrática si tolera el maltrato y asesinato hacia las mujeres, con el agravante de que la violencia es, en mayor medida, ejercida en los espacios dónde debemos estar más protegidas: hogar, entorno, personas en las que confiamos. Necesitamos un mayor presupuesto para combatir y erradicar la violencia que nos atraviesa a tod@s, y eso debe darse como política pública, atravesada por el Estado que al día de hoy, decide estar ausente.





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